La enseñanza artística en la televisión cubana, centro de mira de un espacio creativo
Los Espacios Creativos constituyeron una novedosa iniciativa de verano del Centro Nacional de Escuelas de Arte, que tiene como propósito dialogar sobre las acciones docentes y extracurriculares de los protagonistas del proceso de formación de las artes.
Motivadas por el nuevo coronavirus y su entrada en Cuba, y con el imperativo de mantener el vínculo entre estudiantes y sus especialidades a lo largo del tiempo que se extendiera la situación epidemiológica, surgieron las teleclases de especialidades artísticas en el canal Tele Rebelde de la Televisión Cubana.
Con la presencia de los directores de las facultades adjuntas al Sistema Nacional de Escuelas de Arte, una representación de los maestros involucrados y de los especialistas de la Facultad de Arte de los Medios de Comunicación se desarrolló una jornada de trabajo que regresó las miradas sobre las experiencias vividas durante el proceso de concepción, grabación, salida al aire y posterior seguimiento de esta nueva experiencia.
Las dificultades técnicas, de espacios para la grabación de los programas, el cuidado que exigía el momento inicial de la pandemia en el país y los contratiempos que afrontaron los docentes, en su mayoría jóvenes inexpertos en materia televisiva, no faltaron en los recuerdos de quienes desde sus especialidades artístico-docentes tuvieron el valor de afrontar este nuevo desafío, acompañados de los nervios habituales que provocan las cámaras de televisión.
Cada una de las sesiones de trabajo en el estudio de la Facultad de Arte de los Medios de Comunicación Audiovisual (Famca) conminaron a la creatividad de los maestros, quienes pusieron en práctica alternativas que propiciaron la necesaria cercanía entre ellos y los estudiantes de los niveles elemental y medio de la enseñanza artística.
Romper con miradas y conceptos que pusieron en dudas la posibilidad de lograr el objetivo, y demostrar que los medios alternativos pueden ser aliados en tiempos difíciles fueron de los escoyos sorteadas por los especialistas, maestros y estudiantes-receptores.
Los docentes que asistieron a este primer Espacio Creativo fueron los instrumentistas Raiza Valdés (viola) y Verónica Reyes (violín), acompañadas de los estudiantes Irain Herrera y Karina Hechavarría, que desde sus casas apoyaron las orientaciones con la ejecución de ambos instrumentos.
Otros de los 62 docentes que protagonizaron más de 80 teleclases y que compartieron sus experiencias en una mañana diferente fueron el pianista Ernesto Oliva, el guitarrista Alejandro Coira y la maestra de Solfeo Roxana Pérez Rivera.
“Las formas no presenciales para la enseñanza demostraron con estas teleclases la valía de las tecnologías, sobre todo en tiempos de contingencia. La posibilidad de transmitir a través de un canal de televisión de alcance nacional y con pocas exigencias técnicas para llegar a lugares distantes en la geografía cubana son de los aspectos a destacar.
“En las emisiones fueron tratadas las principales asignaturas de cada especialidad, que por sus contenidos tuvieran capacidades de adaptación y cumplieran con las exigencias del medio televisivo”, comentó el joven y talentoso Ernesto Oliva.
El intercambio intergeneracional fue otro de los aspectos evaluados como positivos en esta experiencia que logró un alto impacto en los estudiantes, quienes aprovecharon las orientaciones de sus maestros, sobre temas antes impartidos en las clases.
A esto se adiciona la posibilidad de visualización del proceso de formación en arte, algo novedoso en la televisión cubana y agradecido por padres y familiares de los estudiantes, quienes de cierta manera se convirtieron en actores de un proceso de construcción colectiva poco conocido.
La cuestionada pertinencia de propuestas televisivas ya existentes (Cercanía y Mirada de Artista), en las que se presentan aproximaciones a la labor de artistas-docentes, quedó demostrada en cada teleclase, por lo cual a partir de agosto comenzaron nuevas grabaciones.
El impacto alcanzado por esta modalidad, unido a la satisfacción de los televidentes, del colectivo docente involucrado y de los alumnos ha sido el motivo principal para que surgiera la propuesta de un espacio permanente en la Televisión Cubana destinado a la enseñanza artística, con acciones metodológicas y de preparación para maestros y estudiantes.
Los televidentes opinan
Aunque las sesiones de trabajo transmitidas por Tele Rebelde para los estudiantes de especialidades artísticas tenían un contenido específico, el público general también disfrutó de ellas. Así lo expresaron Guillermo González y Arlen Reyes, dos vecinos que desde sus hogares no perdieron la oportunidad de aprender algo nuevo.
“Aunque no somos artistas, nos gusta conocer de todo, por eso no perdimos ninguna se las conferencias sobre cultura cubana que transmitieron. Fueron muy buenas e instructivas, también disfrutamos de las clases de danza y de música. Fue una excelente idea de la televisión, porque nunca se había visto cómo se forman los artistas”, comentaron.
Otros criterios importantes fueron emitidos por estudiantes de especialidades artísticas en relación con la calidad de la imagen y del tiempo de duración de las emisiones. “En el caso de la música, cuando se hacían los dictados no se podía ver bien las partituras en la televisión. Además, considero que las clases fueron muy cortas, aunque excelentes, por eso nos quedamos con deseos de más”, comentó Francis Arencibia, estudiante de nivel elemental de música.
En sentido general, las transmisiones de las Teleclases de Arte han sido valoradas de manera positiva, y las expectativas de gestores y público fueron superadas, a partir de lo coherente y bien articuladas que resultaron estas propuestas.
