Hace falta romper esquemas en la radio cubana
Mejorar la calidad de los programas, elaborar guiones interesantes, optimizar la realización técnica y comprometer al público con las propuestas de cada día son los motivos que impulsan a los premiados con el Sello 90 Aniversario y Micrófono de la Radio Cubana, otorgados a artistas y directivos de este medio en el estudio Benny Moré de Radio Progreso, en La Habana.
Al recibir el premio, los homenajeados resaltaron su agradecimiento ante un nutrido grupo de trabajadores de los medios presentes en el evento, y señalaron una mayor responsabilidad después de tan importante reconocimiento.
Para Nora Rodríguez Calzadilla, periodista digital de Radio Enciclopedia, recibir el Micrófono de la Radio significa “una emoción muy grande en cuarenta años de vida profesional.
“Me siento muy alegre y agradecida con el jurado que me tuvo presente, fundamentalmente con el compañero Manuel Andrés Mazorra, quien fue mi maestro, confió en mí cuando yo era muy jovencita y me insertó en este medio tan hermoso.
“Hoy recuerdo con admiración a mis formadores y profesores, quienes lo siguen siendo porque yo siempre soy alumna. Lo más lindo de la radio es que todos somos como una gran familia y cultivamos un amplio sentido de pertenencia”, manifestó entusiasmada.
Para Cristina Reyes, directora de Radio Arte, recibir el Micrófono después de 30 años en el medio “es un reto muy grande porque nos impulsa a seguir siendo cada vez mejores.
“Aunque me lo hayan entregado a título personal, pienso que es un mérito para todo el equipo que dirijo”, precisó la especialista.
Seguir buscando vías más idóneas para llegar con éxito a la audiencia constituye ahora un importante objetivo para Demetrio Villaurrutia, periodista y director de programas en Radio Rebelde, pues “cualquier premio que uno recibe es siempre un punto de partida y un valor simbólico que atesoramos”.
En tanto, Milagros Cherta Fernández, directora de Radio Ciudad de La Habana, destacó que el Sello 90 Aniversario es muy gratificante después de 20 años dedicados con mucha entrega a la radio.
“Este reconocimiento es un estímulo a todas las personas que han dado su vida al medio, permanecen fieles a él y no se han ido para otros sectores. El ser humano necesita ser estimulado, y en muchas ocasiones los que trabajamos aquí somos objeto de mucho control, porque nos exige el público o nos debemos a determinadas normas, conductas. Es una realización compleja”, subrayó.
Para Cherta, la radio cubana necesita romper formalismos, alcanzar una mayor interacción con el público y dar más libertad a la creatividad.
“No podemos encasillarnos en esquemas predeterminados y se necesita más soltura a la hora de hacer. También debemos tener en cuenta que existe una gran competencia con las nuevas tecnologías, y la única manera para que la radio pueda sobrevivir es incrementando la retroalimentación con sus oyentes. Esa es una ventaja tremenda que hay que aprovechar y desarrollar mucho más”, concluyó la directora.