Ariana Álvarez: actriz que sobresale en todos sus personajes
Con su sonrisa espontánea y los hoyuelos en las mejillas, iniciamos el diálogo con esta carismática actriz, animadora, locutora de la radio y de la televisión en la oficina de Relaciones Públicas del Instituto Cubano de Radio y Televisión. Cuenta que de niña nunca le pasó por la mente ser actriz, le gustaba el ballet, la gimnasia y el modelaje.
A los dieciséis años se entera por su padre que hay un grupo de teatro aficionado llamado Olga Alonso, se embulla y matricula en él. Pero a su progenitor no le gustaba que fuera de 8:00 a 11:00 de la noche. Sin embargo, ella persistió porque ya “le ha picado el bichito de la actuación”.
Con el grupo Olga Alonso hizo personajes en obras clásicas tales como: Andoba, Un tranvía llamado deseo, Bodas de sangre, Réquiem por Yarini, Manteca, El currículum.
Matriculó cursos de expresión oral, técnicas de locución y elementos de lingüística aplicada, en la Unión de Artistas de Cuba y en el Instituto Cubano de Radio y Televisión (Icrt), además de un Diplomado de Locución en Radio Reloj.
En este último medio ha trabajado en programas de Radio Metropolitana como noticieros y musicales. Entre ellos: A esta hora, En buena compañía, La súper musical latina.
Parte de su carrera como locutora también la ha desarrollado en Radio Taino, participando en los espacios: Con acento cubano, A buena hora, De mañana, El exitazo, Musitando, Taimoda y El jardín de la noche.
Para la televisión fue presentadora en los programas: Somos multitud, Serenata cubana, Cuerda viva, Más allá de la música, Iguales y diferentes, entre otros.
Afirma, sonriente, que las novelas “son su fuerte” y que las disfruta a plenitud. Destaca su actuación en Destino Prohibido, dirigida por Xiomara Blanco, de quien aprendió mucho en el personaje de “Jesusa”, que toda la teleaudiencia recuerda con agrado.
También reconoce haber crecido profesionalmente formando parte del elenco de la telenovela La cara oculta de la Luna, con el personaje coprotagónico, “Yamina”, así como con el papel de “Mónica” en la novela Polvo en el viento; siendo “Roxana” en Bajo el mismo Sol y, más recientemente, “Luz Marina” en la puesta en pantalla de Latidos Compartidos.
Poco conocido, pero gratificante para ella el trabajo en los programas infantiles Saludando y Tremendos muñes.
También ha realizado papeles en series televisivas como: Punto G, Patrulla 444, Tras la huella y Vivir del cuento. Como presentadora ha aparecido en los musicales: A moverse, Iguales y diferentes, La descarga, Más allá de la música, Entre amigos y Conciertos Discos.
Asimismo ha sido presentadora en varios eventos internacionales como: Congresos de Logopedia y Foniatría, los Festivales Jojazz desde 2006 hasta 2009, el Festival Internacional del Habano, así como eventos organizados por la agencia Musicuba, de la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (EGREM), las Jam sessions del 5to Festival Internacional de Música de Cámara Leo Brouwer (2013), en las “Noches blancas de jazz, flamenco y trova” del 6to Festival Internacional de Música de Cámara Leo Brouwer.
Asimismo ha participado en las galas por Aniversarios de la Televisión cubana.
De su incursión en el cine menciona Listo para la Isla, coproducción del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (Icaic) con Alemania; Tiempo Habana, donde se desempeñó en el protagónico Bárbara. También actuó en el largometraje ¿Por qué lloran mis amigas?, producción de RTV Comercial que dirigió Magda González Grau.
Ariana Álvarez es graduada en la Universidad de La Habana como Licenciada en Ciencias de la Información; pero definitivamente la actuación y la locución han distinguido su desarrollo profesional. Por la calidad de su desempeño ha merecido el Premio de actuación Caricato como mejor actriz en el 2008 por la telenovela Polvo en el viento por el personaje Mónica, que además le ganó Premio de la Popularidad Entre tú y yo.
Este último galardón volvió a recibirlo en 2015, en el apartado de Actriz Femenina, junto a Blanca Rosa Blanco.
Ariana Álvarez es una de las actrices jóvenes de nuestro país que sin haberse formado en escuelas de arte como la ENA y el ISA, ha logrado sobresalir en todos los personajes que interpreta; representa un ejemplo de voluntad, tenacidad y superación profesional.