Medios de comunicación con mirada de mujer
“Aunque en nuestros medios ha habido un creciente interés por incorporar el enfoque de género, tanto en los guiones como en la producción de programas, aún es cuantitativamente bajo el por ciento de directoras de radio, TV y cine”, expresó a En Vivo Tania Caram, profesora de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO).
A juicio de la especialista, en el sector de los medios de comunicación se reproduce el mismo fenómeno que a nivel nacional: las mujeres están representadas mayoritariamente en la base.
“Esa es una de las mayores contradicciones de nuestra sociedad: que no existe correspondencia entre la alta calificación y participación que han alcanzado las féminas y su representatividad en los más altos niveles de dirección.
“Hay que ir a las causas de por qué siguen siendo pocas las directoras de televisión y cine.
“En los créditos de los programas de la pequeña pantalla se aprecia una baja presencia femenina como camarógrafas, editoras, sonidistas y luminotécnicas. Si anualmente se gradúan de la Escuela de Cine y la Facultad de Medios de Comunicación Audiovisual un grupo numeroso de mujeres profesionales de estas especialidades, ¿por qué solo un reducido grupo llega a laborar en la radio y la TV?”, señaló la entrevistada.
Para Caram en nuestra televisión ha habido un crecimiento favorable de los espacios que abordan temas sociales con perspectiva de género, como Cuando una mujer, que ya lleva varios años en la parrilla de programación, y la recientemente exhibida serie Rompiendo el silencio, la cual tuvo muy buena acogida desde el punto de vista de la crítica y del público.
Sin embargo, a juicio de la también Máster en Ciencias, “todavía la transversalización del enfoque de género no está presente en la mayoría de los programas de la televisión y la radio.
“Son vergonzosos los programas humorísticos que denigran la imagen de las mujeres, o la reproducción de lenguajes e imágenes sexistas que aún prevalecen. He escuchado frases de conductoras y conductores que reflejan una gran ignorancia sobre la perspectiva de género. No hace mucho escuché a una persona que defendía las conductas de las mujeres y dijo: «¡no me vayan a tildar de feminista!, como si serlo fuera negativo.
“Claro que esa persona estaba utilizando «feminismo» como antónimo de machismo, y lo que quería decir era «y no me vayan a tildar de «hembrista», sin saber que ser feminista es defender los derechos de las mujeres, que era precisamente lo que estaba haciendo”.
Uno de los criterios más enfatizados por la especialista es el papel que pueden desempeñar los telecentros y los medios locales, en tanto aportadores de historias de vidas que reflejen los problemas del día a día en la comunidad, la cual casi siempre alcanza poca representación en los medios nacionales.
Hablar y abordar los comportamientos diarios de las personas constituye el primer paso para reconocerlos y, por tanto, intentar transformarlos.
Para la también Doctora en Ciencias, “la televisión tiene en Cuba un nivel de audiencia y alcance extraordinario. Por ello es ideal para deconstruir, de manera inteligente, los estereotipos y conductas discriminatorias.
“Los roles de género no son naturales, sino transmitidos culturalmente de generación en generación, por tanto pueden ser reaprendidos a partir de la socialización de nuevos modelos, más equitativos y justos, de relaciones humanas”.
Los directores y guionistas de programas constituyen transmisores de valores, y por ello tienen una alta responsabilidad en los temas que eligen y en la perspectiva desde la cual los tratan.
“Por eso es tan importante la capacitación, pues si los especialistas y dirigentes no tienen conciencia de género no pueden, ellas y ellos, reflejar adecuadamente las relaciones entre los sexos y, en lugar de contribuir a la justicia, lo que están es reproduciendo la inequidad”, acotó Caram.
La radio y la televisión pueden ser muy útiles para lograr una verdadera conciencia y sensibilización acerca de estos temas, pero para ello sus profesionales y técnicos deben superarse y estar al tanto de los más recientes resultados investigativos en el área.
“Las desigualdades de género no se erradicarán solamente con una mayor participación de las mujeres en la vida económica, política, cultural y social del país sino que están muy relacionadas con las actitudes y prácticas culturales de los hombres y las mujeres”, subrayó la especialista.
En este sentido la radio, la televisión y las nuevas tecnologías son esenciales para acercarnos a los diferentes modos de pensar y actuar de las cubanas y cubanos, y socializar entre ellos modelos sociales más participativos e inclusivos, no solo a escala nacional sino sobre todo en el ámbito privado.