Nocturno y sus 58 historias en el éter
Cuando a las 11 de la noche del 6 de agosto de 1966 los cubanos escucharon por primera vez por Radio Progreso el instrumental “La muchacha de la valija”, por el italiano Fausto Papetti, no sospecharon jamás estar en presencia de uno de los programas, devenido con el tiempo, ícono de la radio cubana.
Nocturno, un espacio cuya génesis estuvo fundamentada en popularizar a una naciente hornada de intérpretes del patio y foráneos, cultores de la balada, y de la música pop, pero en igual medida a reconocidos.
Fue a través de Nocturno que varias generaciones de cubanos crecieron escoltados por el sonido de Nicola DiBari, Rita Pavone, Gianni Morandi; Sandro, Leonardo Favio, los Cinco Latinos, y Alberto Cortez.
De los chilenos Los Ángeles Negros; de los Galos, Mona Bel; de los peruanos Los Pasteles Verdes; de los venezolanos Los Terrícolas; y de los uruguayos Los Iracundos.
Intérpretes del país azteca a través de Nocturno, influyeron también en una buena parte del desarrollo artístico sonoro de las generaciones de la Década prodigiosa en Cuba.
Es loable mencionar a César Costa, Roberto Jordán, Angélica María, y los Yakis, aunque merece acotar que los nacidos en esta Isla caribeña sintieron una predilección brutal por “Los Beatles” quienes encabezaron una lista integrada por Juan y Junior, y Los fórmulas quinta, entre otros.
Cuba, reconocida en el mundo por sus aportes a la música puso su granito de arena en esta compilación de agrupaciones y cantantes cuyo proceso de formación comenzó a finales de los años 50 y se afianzó dos décadas después.
Se incluye el grupo «Los Barba», donde se estrenó Beatriz Márquez; y el combo de Franco Laganá con María Elena Pena como solista.
Todos fueron expositores de una música que pegó hasta la saciedad entre los jóvenes y no tan jóvenes, lo que no podía ser de otra manera si tenemos en cuenta la prominencia de su melodía, contagiosa, con letras definitivas por muchos, “loas a un amor de nuevo tipo despojado de ataduras y taxonomías”.
Si la “Década Prodigiosa” con su influencia beat-pop-rock nos trajo canciones armónicas y puras, Nocturno ha servido para transportar hasta nuestros días aquella etapa latente aún en la evocación.
En estos 58 agostos de palpitar en la programación de la Casa azul de Infanta 105, Nocturno ha sido motivación para unir varias generaciones, refugio para enamorados, ilusión para quienes intentan resucitar etapas pretéritas y por encima de todo esto, el espacio capaz de mantener una audiencia fiel a sus transmisiones, que en la actualidad bajo la batuta de Juan Carlos García del Vallin (dirección general, producción musical), y la inigualable conducción de Marlon Alarcón Santana, nos revela sus 58 historias en el éter.