Sonia Castro: «La televisión es mi vida, no me imagino fuera de ella»
La filósofa de graduación, guionista, directora, asesora de televisión, documentalista y realizadora de promoción y publicidad para la pequeña pantalla, Sonia Castro comenta sobre momentos importantes dentro de su tránsito por la televisión cubana.
Artista de mérito de la televisión en 2022, laureado por muchos de los espacios que ha tenido a su cargo desde su llegada al medio en 1989, Sonia Castro es de las realizadoras que vive para la televisión.
Inquieta, inconforme con los resultados de trabajo— por buenos que otros los cataloguen—, tal vez su condición de filósofa por profesión y convicción, la hace hurgar a fondo sobre los más variados fenómenos que le circundan.
En tal caso hicimos una pausa en medio de una serie de ideas que tiene sobre el tintero para compartir unos minutos, y conocer de algunas de sus experiencias; por cierto, un año antes de que su valioso proyecto Entre tú yo se prepara para celebrar los primeros veinticinco años.
Sonia, ¿cómo llegas a la televisión?
“Bueno el camino lo tomé en el año 89. Soy graduada de filosofía y no tenia aun ubicación porque realmente nunca he tenido vocación por la docencia, ni siquiera universitaria, donde me habían ubicado.
Conocía a Rodobaldo Hernández (por entonces director de Tele Rebelde), y él mismo me invita a entrar en el departamento de propaganda y publicidad de ese canal que dirigía Cary Bermúdez
Así me inicié y luego de una gran verificación, dentro de esa especialidad me he mantenido toda mi vida en la televisión (más de treinta años).
De Tele Rebelde me trasladaron a Cubavisión y dentro de esa especialidad he aprendido muchísimo porque la propaganda, como parte de la comunicación, ofrece diversas herramientas para analizar y esbozar los fenómenos. Tuve que estudiar mucho porque a mi llegada no sabía nada de televisión y menos del mundo de la comunicación. Me inicié como especialista en medios; luego pasé a ser asesora y por último me gradué de dirección en el ISA”.
¿Qué significa para ti la televisión?
«La televisión es mi vida y aun cuando sé que soy capaz de desempeñarme en otras esferas, no me imagino fuera de ella. Es lo que me gusta. También el cine me place; pero no tiene el alcance de la televisión; no te “regala” ese estrés de trabajar contra el aire, de hacerlo en vivo; no exacerba esa adrenalina tan necesaria en el proceso creativo televisivo. Por otra parte, la televisión es más íntima y siento que conecta más rápido con la gente.
«Y otra cosa, dentro de ella me gusta asumir cualquier género. Es cierto que me he especializado en las revistas; pero he trabajado infantiles, musicales, en menor medida dramatizados, pues han sido proyectos muy sencillos; no por falta de oportunidad, sino por intereses personales».
¿Qué espacios han marcado especialmente tu carrera?
«Por supuesto que lo primero en mencionar es Entre tú y yo porque la revista, como género, da esa posibilidad de siempre crecer. En una revista no puedes repetirte, las secciones de la misma exigen un determinado ritmo, versatilidad temática; permiten moverte a lugares diferentes, lo cual significa que la revista está ajena a cualquier estatismo.
«Por otra parte, es muy interesante también por los códigos que la identifican porque no todas las revistas son iguales. La revista, a su vez, me ha permitido aprender de periodismo; de todas las especialidades y tener una visión más amplia del medio televisivo.
«Por su parte, el proyecto Entre recetas también me marca, en tanto me permite incursionar en otros temas, y eso me ilusiona. Es por esto que pretendo cada vez darle nuevos vuelcos. Es un programa que me exige mucho porque mucho tengo que estudiar, entre otras cosas porque soy una mujer que no sabe cocinar o lo hago bastante mal; y confieso no poseer cultura alimentaria, así que ante cada programa se abre para mí una zona amplia de aprendizaje.
«De la misma manera que aprehendo el universo culinario nacional e internacional, he conocido a muchas personas interesantes que me aportan desde lo profesional y humano, y en eso tiene que ver el hecho de que a veces a chef y cocineros no se les otorga el justo valor que merecen, sobre todo si se trata de mujeres. Y estas son otras aristas que el espacio dimensiona y afirma, por eso sus protagonistas siempre son féminas. «Otros espacios que han dejado su impronta en mí, fueron las revistas que asumí en el canal Educativo para niños de edad prescolar (3-5 años). Edades hermosas donde la ingenuidad de ellos permite hacer maravillas. Fue una experiencia enriquecedora y ahora, que soy abuela, estoy segura que puedo ayudar mucho a mi nieta con todo lo que aprendí».
Volviendo al popular espacio Entre tú y yo, ¿qué crees que va necesitando en estos casi 25 años?
«Entre tú y yo es un programa que hay que seguir mejorando; lo siento un poco estancado, y no lo voy a justificar en causas ajenas a la voluntad del equipo, pero eso también influye. Por supuesto, no estamos exentos de las tantas dificultades productivas existentes: la falta de combustible y transporte, por ejemplo, nos ha hecho tener que alargar las entrevistas y eliminar secciones en tanto no es posible salir a grabar en exteriores.
«Ante tales circunstancias, estoy ahora mismo enfrascada con mi asesora en tratar de mover un poco lo que hay; pero no creo que este año se puedan lograr grandes cambios. No obstante, pretendo lograr una presentación nueva, algunas variaciones en la gráfica; la escenografía se mantiene bastante bien aun cuando quisiera hacerle alguna que otra variación a la terraza, también a la iluminación y darle mayor ritmo a la edición.
«Realmente, siempre quiero cambiar, sobre todo porque cuando un programa lleva tanto tiempo en pantalla si no lo haces; muere. Y el próximo 29 de marzo Entre tú y yo cumplirá 25 años. Irela, mi anfitriona de siempre, y yo somos sus fundadoras; y en él hemos transitado por todo: momentos buenos y otros, no tanto. Hemos visto fallecer a mucha gente valiosa, no solo artistas reconocidos; también a compañeros de trabajo, incluso, de nuestro colectivo. Así que Entre tú y yo es un hijo de 25 años al que le hemos entregado todo y de la misma manera lo hemos recibido».