Un niño de película, historia que viene del ayer.

Naida Montes Hernández
Atraídos por un libro para niños que toca las fibras más sensibles de los seres humanos, los amantes de la literatura infantil se dieron cita en la librería Fayad Jamis del Centro Histórico de la Ciudad, decididos a disfrutar la presentación del volumen Un niño de película, de la autoría de Naida Montes Hernández.

El texto recoge la historia de vida de un infante nacido y criado en el poblado de Madruga, en la actual provincia de Mayabeque; comportamiento, y travesuras, a través de las cuales se describe la dinámica social de esa demarcación, en las primeras década del siglo XX.
En el prefacio a este volumen, su prologuista Juan Pérez Díaz asegura que Un niño de película, refleja las costumbres, modos de vida y diferentes matices de la identidad de los cubanos, así como lo relacionado con la infraestructura madruguense.
Clasifica como libro de cuentos, pues está conformado por varios de estos, a pesar de fundamentarse en los testimonios ofrecidos por el protagonista (padre de la autora) enriquecido con otros de familiares, amigos y conocidos.
Un niño de película estimula a retomar actividades propias de la época, y ofrece una visión positiva del juego infantil en exteriores, alejado de dispositivos electrónicos.
El nuevo volumensalió a la palestra pública como parte del catálogo de la Editorial Ediciones En Vivo, de la Radio y la Televisión cubanas.
Sobre la propuesta la Doctora Norma Gálvez, directora del sello expresó: “Es un texto muy dulce y a la vez emocionante, con un personaje cuyo proceder te involucra desde las primeras páginas, mientras su narrativa está apta, para convertirse lo mismo en guión de radio que de televisión, con la finalidad de hacer un serial o una aventura”.

Acotó que para la Feria Internacional del Libro del próximo año se valora la posibilidad de presentar el título en Madruga, donde se desarrolla la trama de esta historia.
Naida Montes Hernández autora del libro se ha desempeñado durante más de medio siglo en el Instituto Cubano de Radio y Televisión, como especialista de la programación de cambios en la esfera de la propaganda y la publicidad de la televisión cubana.
Posee elevada sensibilidad para la narración, aunque este es su primer y último texto pues, según expresó a Fernando Rodriguez Sosa, conductor del espacio en la Fayad Jamis, “escribir demanda mucho tiempo”.