La televisión pretérita por dentro
Panel de presentación integrado x Fernando Rodríguez Sosa, Norma Gálvez, y Mario Naito López.
La libreraía Fayad Jamis en La Habanaa Vieja, en horas de la tarde de este 11 de octubre se vistió de largo con la presentación del libro Memorias de un olvido, de la autoría del fallecido José Raúl Estol Román.
Publicado en tres tomos por el sello editorial Ediciones En Vivo bajo la tutela de Norma Galvez, el texto del también Premio Nacional de Televisión 2012 por la obra de toda la vida analiza la etapa fundacional de la televisión cubana desde el año 1950 hasta 1962 en que se crea el Instituto Cubano de Radiodifusión.
En el volumen aparece tanto la valoración realizada por el autor sobre su tema objeto de estudio como documentos, datos e informes que contribuyen a enriquecer la historia y el conocimiento de la televisión en Cuba.
Memorias de un olvido tiene un prólogo firmado por el investigador y profesor Mario Masvidal Saavedra donde señala la importancia del libro, no solo para estudiantes e investigadores sino para todas las personas interesadas en conocer acerca de la génesis y desarrollo de la televisión cubana.
Conducido por el periodista y crítico Fernnado Rodríguez Sosa, la presentación estuvo acompañada por la directora de Ediciones En Vivo, Norma Gálvez Periut; el investigador y crítico de cine Mario Naito López, así como periodistas y amantes de la lectura.
“Memorias de un olvido” es absolutamente necesario al abordar un amplio período de la televisión, con un alto nivel de veracidad, fundamentado en la investigación minuciosa.
Es un libro muy objetivo y exacto que trata, entre otros aspectos, las suspenciones y censuras de la televisión antes de 1959.
Se estructura en tres tomos. El primero trata sobre la lucha de Pumarejo para traer la televisión al país, posteriores rivalidades entre dueños de televisoras, los diferentes canales surgidos con el tiempo, así como cuestiones tecnológicas y regulaciones..
El segundo presenta la programación desglozada por cada uno de los géneros (humorísticos, infantiles, musicales, dramáticos); mientras el tercero asume la nacionalización de la televisón, el momento en que se funda el ICR y la elevacion de su carácter educativo.
Al término de la presentación se vendieron varios volúmenes a un público ávido por conocer la televisión pretérita por dentro.
Fotos: Cortesia de la autora
