La televisión y la radio fueron las últimas (1977) en ser reconocidas por la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), aunque algunas de sus personalidades eran incluso fundadores, pero en literatura, cine, música, artes escénicas y plásticas.
Avelino Víctor Couceiro
En nuestra televisión, es cotidiana y saludablemente esencial remitirnos a otros idiomas, lo cual aumenta su complejidad, sea por traducciones orales o escritas a leer, doblajes, o al pronunciar sus nombres.
Los cómics han logrado su propia estética que los identifica en todo el mundo y también a sus derivados cinematográficos y televisivos, pero además inciden ética y culturalmente en la formación de su público y de toda la sociedad.
Mucha ciencia ficción no emana de cómics y muchas historietas son ajenas a la ciencia ficción, aunque a menudo coinciden es inequívoca relación. Se impone comenzar por preguntarnos, ¿qué entender por ciencia ficción? Aquí damos pinceladas de este género en la televisión de verano.
Muchas dificultades tiene que vencer Collazo para Unos minutos en la vida de…: quejas por el horario de transmisión, dificultades con el transporte para moverse con los equipos a las casas de los artistas. Pese a todo su trabajo continúa inclusive como expositor y curador de exposiciones que ha transformado en genuinos espectáculos
Los inicios artísticos de Carlos Collazo se remontan al año 2009, como guionista de las Galas en el teatro Mella (2009 y 2014), pero tanto más ha hecho en las artes cubanas que esté artículo solo recoge una pequeña dosis de su grandeza.
Al avanzar el siglo XXI aumenta el tratamiento de la homosexualidad en nuestros audiovisuales incluso en los disímiles telecentros del país, y en particular, en las telenovelas. Aquí repasamos sin pretender citar, ni valorarlas todas.
A duras penas, la palabra “homosexual” comenzó a ser balbuceada en televisión cubana durante los años 90 por funcionarios de Salud Pública, enfatizando sobre el sida en la homosexualidad. Hoy, aunque el tratamiento es diferente a aquellos tiempos, sigue teniendo rechazo o malas interpretaciones.
Hoy, amenazados al absolutizarse excluyentes “las nuevas tecnologías”, hay programas “para jóvenes” que proponen al debate urgentes problemáticas nunca antes tratadas, como el bullying.
Idear una programación para niños y jóvenes en la televisión cubana, no debería ser una camisa de fuerza. Aunque cada espacio siempre tendrá sus códigos propios, la magia es que llegue a todos sin importar nada más.